La incertidumbre dominó este tiempo. Muchos de los hábitos y certezas que rigen nuestras vidas se desvanecieron, entraron en un limbo, se reformularon. Nos vislumbramos vulnerables, muy frágiles. Ese mismo sentimiento que un indecible número de personas que hace años ya hizo carne, inmersos en una larga y crítica situación social. La pandemia nos hizo experimentar impotencia, temor, desconcierto. Son muchos los debates que la coyuntura propone. Sin embargo, hay una constante que late, un acuerdo tácito refrendado silenciosamente por cientos, miles de personas, a través del voluntariado: la solidaridad, el compromiso y la voluntad transforman.

Y aún en este complejo contexto no fue distinto, estuvieron ahí, dispuestos a ofrecer sus manos, con generosidad, valentía y mucha convicción. Es que ya hace mucho se dieron cuenta y acordaron trabajar juntos por lo que hace falta. Personas comunes, anónimas, que agrupadas informalmente o integradas a organizaciones, nos muestran desde la sociedad civil un camino de encuentro, posible y necesario.

Satisfechos por haber concretado esta edición aniversario. Muy agradecidos a las instituciones que nos acompañan, similares y distintas, reunidas en torno a un objetivo común: homenajear y difundir los valores del voluntariado. Gracias a los participantes que desde hace diez años documentan historias que contagian y esperanzan, que nos cuentan desde cualquier rincón del país y de primera mano qué es Ser Voluntario en imágenes.

Pablo José Rey
Asociación Civil Rumbo Sur